KERENDIA es un medicamento de venta con receta que se usa para tratar la enfermedad renal crónica en adultos con diabetes de tipo 2 para reducir los siguientes riesgos:
Agravamiento de la enfermedad renal
Insuficiencia renal
Muerte debido a una enfermedad cardiovascular
Ataque cardíaco
Hospitalización por insuficiencia cardíaca
Información importante de seguridad
No tome KERENDIA si usted:
Tiene problemas en sus glándulas suprarrenales.
Toma ciertos medicamentos llamados inhibidores de CYP3A4. Consulte con su médico si no está seguro de estar tomando alguno de estos medicamentos.
Antes de tomar KERENDIA, infórmele a su médico todos sus problemas de salud, incluso en los siguientes casos:
Si tiene niveles altos de potasio en la sangre
(hiperpotasemia) o toma medicamentos que pueden aumentar los niveles de potasio en la sangre. KERENDIA puede provocar hiperpotasemia. Su médico controlará sus niveles de potasio antes y durante el tratamiento con KERENDIA.
Si tiene problemas hepáticos graves.
Si está embarazada, tiene planes de quedar embarazada, o bien si está dando el pecho o tiene planes de hacerlo. Evite dar el pecho durante el tratamiento con KERENDIA y 1 día después del tratamiento.
Infórmele a su médico todos los medicamentos con receta y de venta libre que tome, incluidos sustitutos de la sal, vitaminas y suplementos a base de hierbas o con potasio.
KERENDIA puede afectar la forma en que otros medicamentos funcionan, y otros medicamentos pueden afectar la forma en que KERENDIA funciona. No comience ni abandone tratamientos con medicamentos sin hablarlo con su médico. Evite comer toronja o beber su jugo, ya que esto puede aumentar los niveles de KERENDIA en sangre.
Los efectos secundarios más frecuentes de KERENDIA incluyen:
Hiperpotasemia (un nivel de potasio en la sangre que es más alto que lo normal)
Hipotensión (presión arterial que es más baja que lo normal)
Hiponatremia (un nivel de sodio en la sangre que es más bajo que lo normal)
Consulte la Información para prescribir de KERENDIA en español e inglés.
Información importante de seguridad
No tome KERENDIA si usted:
Tiene problemas en sus glándulas suprarrenales.
Toma ciertos medicamentos llamados inhibidores de CYP3A4. Consulte con su médico si no está seguro de estar tomando alguno de estos medicamentos.
Antes de tomar KERENDIA, infórmele a su médico todos sus problemas de salud, incluso en los siguientes casos:
Si tiene niveles altos de potasio en la sangre
(hiperpotasemia) o toma medicamentos que pueden aumentar los niveles de potasio en la sangre. KERENDIA puede provocar hiperpotasemia. Su médico controlará sus niveles de potasio antes y durante el tratamiento con KERENDIA.
Si tiene problemas hepáticos graves.
Si está embarazada, tiene planes de quedar embarazada, o bien si está dando el pecho o tiene planes de hacerlo. Evite dar el pecho durante el tratamiento con KERENDIA y 1 día después del tratamiento.
Infórmele a su médico todos los medicamentos con receta y de venta libre que tome, incluidos sustitutos de la sal, vitaminas y suplementos a base de hierbas o con potasio.
KERENDIA puede afectar la forma en que otros medicamentos funcionan, y otros medicamentos pueden afectar la forma en que KERENDIA funciona. No comience ni abandone tratamientos con medicamentos sin hablarlo con su médico. Evite comer toronja o beber su jugo, ya que esto puede aumentar los niveles de KERENDIA en sangre.
Los efectos secundarios más frecuentes de KERENDIA incluyen:
Hiperpotasemia (un nivel de potasio en la sangre que es más alto que lo normal)
Hipotensión (presión arterial que es más baja que lo normal)
Hiponatremia (un nivel de sodio en la sangre que es más bajo que lo normal)
Consulte la Información para prescribir de KERENDIA en español e inglés.